viernes, 3 de agosto de 2012

La libertad económica

por mucho tiempo el dinero se ha convertido en un esclavizador de los trabajadores, aunque en sí el dinero es solo un medio que asociado al consumo se convierte en un verdadero vicio desenfrenado de gastar y gastar.
pocas personas en la actualidad pueden distinguir verdaderamente cuando se encuentran frente a una situación entre una necesidad y un lujo y muchas veces prefieren el lujo a satisfacer una necesidad entrando en un conflicto que cada vez se convierte en el detonante de grandes discusiones.
Es necesario aterrizar:
la mayoría de los jóvenes cuando ingresan a la vida laboral, ven a su primer salario como si fuera un cúmulo de riquezas interminable, claro, como no tienen deudas, ni pagos, ni obligaciones, todo ese dinero está listo para gastar.
una vez que tienen su primer salario, incluso antes de tenerlo ya han planificado los gastos a realizar - es ahí donde empieza la masacre- derrepente sienten que el dinero no es suficiente, y antes de que termine el primer mes ya están esperando su siguiente salario, no existe una cultura de racionalización y de ahorro, y esto no solo ocurre con los jóvenes, sino que se puede arrastrar a personas en edad adulta -consideradas maduras- en realidad la madurez consiste en el hecho mismo de aterrizar y aprender a usar la razón de manera lógica no en los demás, sino en uno mismo pensando en el bienestar de los demás. aunque parece complicado, esto solo se puede entender detectando las bases de nuestros problemas:
1. por qué las personas gastamos el dinero de manera tan rápida.
2. existe una planificación racional de nuestros recursos.
3. controlamos nuestros gastos o simplemente actuamos de manera espontánea.
4. debes de tener presente que las realidades económicas de cada persona no son constantes, sino que cambian frecuentemente.

Debemos de aprender a despertar del mundo de fantasía de libre disponibilidad, porque una vez que empiezas a trabajar, aparecen los nuevos gastos producto del consumo, entonces tenemos que ser ágiles para interponernos a las circunstancias y pensar friamente en todas las opciones posibles de lo que nos puede reparar el futuro.

no seas un esclavo del dinero, tienes que despertar y empezar a crecer cada dís, solo responde a esta pregunta: ¿desde que trabajaste cuanto ganaste, y cuánto tienes de todo lo que ganaste, en qué invertiste, dónde está tu dinero?, si puedes satisfacer a tu conciencia con las respuestas, entonces se puede decir que estás por buen camino, pero si existe un pequeño remordimiento en tu interior, entonces es hora de reflexionar y empezar de nuevo un camino de superación, para ser libre en este aspecto.

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